Y si resulta...

...Que el verdarero virus es el miedo, que se engarza en las entrañas y me habita como la hiedra que se enreda en el árbol...?

¿Y si resulta que me acostumbro a estar a un metro de distancia de todo el mundo, incluida tu y ellos, y me crecen alambres de espinos alrededor, y mi capacidad de amar tocando se funde en una primavera vacía de colores?

¿Y si resulta que me acostumbro al horizonte próximo de mis paredes y la luz de la calle me ciega y me abruma?

¿Y si resulta que ahora, que dormimos en camas y habitaciones  separadas para que no haya contacto accidental ,nos volvemos celosas guardianas de lo uno y olvidamos que desde hace trece años las noches nos han visto, todas y cada una, bajo las mismas sábanas, y se nos congela el alma, y una mampara de sombra nos impide que volvamos a confiar en la seguridad que nos hemos dado hasta ahora?.

17 días de confinamiento.Ayer, se confirmó que mi madre había pillado el puto virus.Y yo, que la toqué lo mínimo, temo a lo que pueda pasarle a ella,pero temo por igual a haberme contagiado.Quizás soy muy egoísta...pero la situación está empezando a superarme...mi mujer que me ruega que no me acerce demasiado porque ella ha de ir a trabajar y si se contagia han de cerrar el mercado entero, mi hermana, que muestra una tristeza que yo no soy capaz de expresar...

Aún saldré al balcón a cantar a voz en grito "resistiré"...si las 25-30 veces que me lavo las manos al día, la manía de desinfectarlo todo y el entreno en abrir  y cerrar las puertas con el dedo meñique de la mano izquierda , o con el pie ,me dejan tiempo...

¿De qué va a ir el post?

¡Bingo!.El tema que ha eclipsado a todo lo demás:el coronavirus. No sé si nos dicen la verdad, si nos mienten descaradamente(¡que novedad!), si el confinamiento durará 15 dias, o un mes, o más o menos, si esto durará y durará o si, como sucedió con otras enfermedades, de pronto se irá diluyendo todo y quedará como un recuerdo agrio y lejano...

Tampoco sé si tanta red social, tanto recurso on line, tanta influencer aprovechando el tirón para elevar el postureo a la máxima potencia nos conviene o nos va a volver más locos de lo que ya estamos.

No salgo al balcón a aplaudir a los que trabajan en el sector de la sanidad, ni a los que, como mi pareja y mi hijo mayor han de ir cada día al trabajo porque venden productos de primera necesidad,porque pienso que los aplausos no van a dignificar las condiciones en las que trabajan muchos médicos, enfermeras, auxiliares, cuidadores,y asalariado en general...a ver cuando esto pase si nos manifestamos con tanto vigor como ponemos en chocar una mano contra la otra...

Y me parece muy desafortunada la actuación del gobierno español sacando a la calle a los militares ,me entra vomitera viendo a ese imbécil que pretende tenerla más larga que aquellos que piden permiso para implementar unas acciones que se saben imprescindibles para atajar la expansión del virus...

Y me parece repugnante el manto de silencio que ,con la excusa del coronavirus, ha cubierto el coronagate.Que bien les ha venido este quilombo, que diría un argentino...

Vuelta al cole...

Una vez estrenado el nuevo año,y acabadas las festividades varias, toca reincorporarse a la rutina...

Mañana volvemos a las clases.Mis alumnos y alumnas son adultos,o todo lo adulto que se puede ser con 19,20,21 años, y la mayoría están pegados al móvil, y les importa más aprobar que aprender.Es cierto que cada curso me encuentro con algunos/as chicos/as que son un lujo y dan sentido a mi trabajo,pero los otros, los que parece que te hagan un favor viniendo a clase,escuchando a medias lo que nos les interesa en absoluto y levantando de vez en cuando la vista de lo que sea que están haciendo mientras explico,los otros de cada vez son más...no quiero pensar en cómo se las apañan los maestros de primaria o el profesorado de la ESO...porque el alumnado se las trae...

En nuestro instituto, la moda desde hace un par de cursos es arrancar las teclas de los teclados de los ordenadores de las aulas de informática, y si el salvaje es graciosillo, o imbécil de solemnidad, o las dos cosas,volverlas a insertar formando frases  como "viva VOX"...

Hace poco menos de un mes me robaron el teléfono móvil de la sala de profesorado;estando yo dentro de la susodicha sala, con otra compañera.Estábamos de espaldas a la puerta de entrada porque los ordenadores con los que trabajamos están así colocados(un ¡bravo! para él que tuvo la brillante idea),y no nos dimos cuenta de que entrase alguien...pero mi móvil desapareció y no ha vuelto a aparecer,de hecho, le quitaron la tarjeta al poco de robarlo y no conseguí ni poder ubicarlo,señal inequívoca de que ya habían retirado la SIM...y aún tuve suerte de poder recuperar todos los datos, por obra y gracia de las benditas copias de seguridad.No ha sido posible saber quien ha sido, ni desde dirección se han preocupado en exceso por averiguarlo,me comentaron que aquel mismo día alguien ajeno al instituto saltó al interior , que se disparó la alarma instalada a fin de detectar intrusos...y así ha quedado la cosa.hay que decir que en el momento de desaparecer mi teléfono, sólo había alumnado de ciclos, y apenas 4-5 grupos, ya que los viernes la mayoría salen antes...

Pues nada, como se dice por aqui:Sant Tornem-hi!

Pues nada...¡a empoderarse!

Corrían los años 70, allá por el principio de la década.Aún estaba vivo y coleando el Paco, santo patrón de los nuevos "constitucionalistas", según telemierda y otros medios de desinformación.

Pues eso, que yo tenía 10 años más o menos y mi santa  madre, que debía ser visionaria, quiso que su hija primogénita se empoderarara y-o-u empoderase.Total, que me apuntó a costura, para que hilos y agujas mediante, yo fuese la más empoderada del barrio.Cabe decir que mis señoras primas, las tres que ya estaban en edad de empoderarse como yo, cosían y bordaban.

A mi no me dió la gana.Dije que nanai, que no me gustaba coser, que lo odiaba, que a mi lo que me molaba era leer, y estudiar, y esas cosas que las mujeres de verdad parece ser que no se plantean hasta que están hasta el coño de empoderarse a base de coser botones.

Y no fuí.He cosido botones, alguno, tampoco sin pasarse, que a mi esto del empoderamiento nunca me ha quitado el sueño.También he hecho algún orillo de pantalón, incluso en mi época mujercita hetero(por la gracia de un psicólogo que se empeñó en "sanar" mi orientación sexual de nacimiento a base de  recetarme la búsqueda  de un  hombre de verdad y la realización de quehaceres femeninos),saqué algún patrón y cosí un vestidito de niña que se ha quedado sin estrenar porque ninguno de mis dos hijos varones lo ha llevado...¡que cosas!.(Cabe decir que el Dr. Martín, que por lo demás me ayudó bastante, había sido sacerdote antes de dedicarse a la psicología y a formar una familia bastante amplia).

Pues nada, que ahora me hallo desconsolada, a mis 58 años, después de leer que una señora de ese partido tan chachipiruli que lo votan más de 3 millones de imbéciles afirma que "coser un botón empodera mucho"...y yo estudiando, un ciclo profesional de 5 años, graduándome en magisterio, licenciándome en ciencias de la educación, trabajando para pagarme los estudios,y luego para ganarme la vida, teniendo dos hijos y sacándolos adelante, saliendo del armario gloriosamente ...hubiera podido empoderarme buscando un macho-man y cosiendo los botones de su camisa.Siéntome abrumada, la verdad...

Estoy por presentar una propuesta en la próxima reunión de mi departamento(soy jefa de departamento desde hace 7 cursos,cosas de no estar empoderada),para discutir sobre la conveniencia de incluir la costura en el currículo de FP....eso sí, sólo para las féminas(¡no vaya a ser que se conviertan en  feminazis o lesboterroristas!).

Los machos,mientras,pueden follarse a la cabra de la legión mientras cantan "el novio de la muerte".

(O le pongo ironía o me dan ganas de salir a la calle a hacer cosas que no digo porque igual me cerraban el blog).

La sentencia

Los criminales temen a las ideas,por eso condenan y encarcelan a quien temen.Lo que no saben es que el criminal muere,pero las ideas no.
Hoy se ha consumado otra gran farsa ,una gran ignominia, que junto con la condena a los chicos de Alsasua demuestra la bajeza de un pais que se llama democràtico...malditos sean los que las han perpetrado.
Me vienen a la cabeza los versos de Lluis LLach:
Assassins, de raons, assassins de vides,
que mai no tingueu repòs en cap dels vostres dies
i que en la mort us persegueixin
les nostres memòries...

Ni oblit ni perdó

La ignorancia no se va de vacaciones

Después de un curso intenso y de un mes de Julio pringada ejerciendo de vocal en un tribunal de oposiciones, parece que ,por fin,puedo descansar y tener tiempo para mi. Pero uno de los efectos indeseados de este aumento de tiempo libre es el aumento paralelo de seguimiento de las noticias publicadas en las redes sociales, sobretodo en ese batiburrillo llamado facebook.

La verdad es que me iría mejor pasar de según qué cosas, pero una es así...y me indigno mucho ,pero mucho...

Tampoco es que el face sea muy fiable, pero cuando el río suena...

Vivimos en un país en el que la ignorancia se saca a pasear a la mínima, como si fuese algo de lo que uno/a se pudiese sentir orgulloso/a...y si además de ignorante, te sale la vena anticatalana ya se puede llegar al   esperpento.

Leo una noticia sobre un sanitario conductor de ambulancias que ,según parece , tuvo un brote de patriotismo casposo ante una persona que se dirigió a él en valenciano...y ya se sabe que el valenciano comparte raíces con el catalán, lo cual es ofensivo para según que salvadores de la patria...

Tampoco sería para alarmarse el hecho de que un imbécil hiciese gala de su imbecilidad supina, al fin y al cabo, pobre bestia, tampoco es que sean capaces de mucho más...lo alarmante, lo indignante, son los comentarios que genera la noticia, y cómo una buena cantidad de gente justifica el hecho porque "estamos en España", y las lenguas cooficiales ya se sabe, están para tocar los c..., no para aprenderlas.

A mi, cómo persona bilingüe desde siempre, no me cabe en la cabeza esta actitud, cómo no me cabe en la cabeza que se hable de la imposición del catalán en las escuelas, cuando lo verdaderamente difícil es escuchar a alguien que no hable en castellano...y ya hace tiempo que me toca la moral tener que ser yo la que cambie de idioma ,de catalán a castellano, so pena de ser tildada de "nazi","supremacista" o cualquier otro palabro semejante que una panda de descerebrados han aprendido como loros y vomitan cada dos por tres.

Algo se ha despertado hace tiempo,y no precisamente por culpa del procés, cómo tan desafortunadamente afirmó la Sra.Carmena;algo que siempre había estado ahí, esperando a que la impunidad se hiciese norma, y los ignorantes se lanzasen a pasear su odio hacia todo lo que no entienden(y no entienden nada, eso es lo grave).Algo que tendría que cortarse de raíz ...

Quizás sería buena  idea empezar porque  que la ignorancia se tomase unas vacaciones...

Neus Català.

Ayer moría Neus Català, a los 103 años.Una de las últimas, quizás la última de las muchas,miles de mujeres que vivieron un horror tan inimaginable como espantoso...

Se hace difícil creer que la humanidad haya podido caer, y aún caiga, por desgracia, en tamaña ignominia,se hace duro pensar como la maldad de unos pocos puede destrozar la vida, el futuro y la ilusiones de tantos...

Y ahora, que chacales disfrazados de políticos luchan por hacerse con ese poder que consideran suyo y que les da patente de corso para pasarse los derechos del prójimo por la entrepierna,deberíamos recordar a tantas y tantos que pasaron por esos campos del horror precisamente por luchar a favor de las libertades.

Pero hoy, la noticia de la muerte de Neus Catalá, como he leido en un artículo de "El Nacional.cat", ni siquiera ha merecido un espacio en la portada de muchos diarios:Ara , El Punt Avui i el periódico(se habran dado un golpe en la cabeza???) le han dado un espacio, pero el resto, incluido "La  Vanguardia" que sólo ha hecho una referencia de pasada en el interior, ni se han inmutado.

Quizás porque además de luchadora por las libertades era mujer...y ya se sabe, las mujeres seguimos siendo menos importantes incluso a la hora de morirnos.