domingo, 6 de enero de 2013

Mis deseos para el nuevo año...

...ya desde el principio veo que no van a cumplirse...y es que no nos dan un descanso.Ya llevo días queriendo escribir una entrada de aquellas típicas,lo que viene siendo "deseos para el año que empieza"...y poco a poco lo he ido dejando para  mañana, al más puro estilo funcionario(más vale que me ría,porque un nuevo recorte se perfila en el horizonte, diga lo que diga el FMI, que para eso los catalanes somos muy adelantados, y cuando el resto del país empieza a ponerse en posición, a nosotros ya nos han sodomizado unas cuantas veces)...pero a lo que iba,que el nuevo año no me ha curado de mi costumbre de irme por los cerros de Úbeda.
Vamos a ver:los deseos para el nuevo año querían ser deseos referidos al blog, al contenido de mis entradas.Tengo otro blog, privatizado,en el que dejo constancia del día a día,y en la esfera de lo privado,mi deseo de momento es "Virgencita, que me quede como estoy".Soy consciente de ser una persona "privilegiada":tengo trabajo, una família que me quiere y a la que quiero,y de momento, buena salud.No puedo, ni quiero,pedir más...
Pero cuando cumplí 50 años, me autoregalé este espacio para poder despotricar a gusto,para escribir sobre todo lo que me pasase por el coco,y aunque parezca lo contrario,  escribir también sobre cosas bonitas, buenas, alegres...y ése era mi deseo para el nuevo año:poder escribir en  mi blog buenas noticias,y no pillar cabreos por cosas tan futiles como que Telefónica haya colocado de asesor al señor que después de joder a mucha gente mientras ha estado al frente de Bankia ahora podrá seguir puteando a gusto ,como la última gilipollez  noticia por lo que a moda respecta,que parece estar haciendo furor (aunque la primera vez que lo leí no me lo podía creer) que consiste en la amputación del dedo meñique del pie para poder llevar zapatos estrechitos,estrechitos...y bueno,pues eso, que me temo que continuaré soltando sapos y culebras desde aquí, cual furibundo cura desde el púlpito...yo creo que a esas gilipollas chicas que no dudan en someterse a una operación para poder lucir zapatos torturantes,se les podría  proponer,para acabar de completar el conjunto, que se sometan a una clitoridectomía para que las bragas no rozen en la pepitilla, y se coloquen un cinturón de castidad, que es de lo más fashion,además de vendarse los pies por la noche, como hacían las mujeres chinas tiempo ha,así irán, poco a poco, y sin sentir,reduciendo su tamaño,y aún podran calzarse zapatos más estrechos...también podrían, de paso, amputarse el cerebro,porque para lo que les vale,la diferencia sería mínima y no correrían el riesgo de usarlo para pensar.Señor,¡si las primeras feministas levantaran la cabeza!

2 comentarios:

  1. Jajajajajaja buenísimo!!! Cuando el diablo no tiene que hacer, con el rabo mata moscas xD

    ResponderEliminar
  2. Por suerte salí de esa empresa (Telefónica), antes de que entraran una pila de mangantes, menuda pandilla de compañeros, antes por menos de lo que han hecho esos te despedían.

    Un saludo

    ResponderEliminar