Era maestro.Catalán, de Mont-roig del Camp, y republicano.Cuando le dieron destino en un pueblucho llamado Bañuelos de Bureba, provincia de Burgos,quiso llevar un aliento nuevo a las mentes de sus alumnos,sin saber quizás que en esa tierra borde,adusta e inhóspita,en esa España de corazón helado y helador, de lagunas negras y almas aún más negras,esa España que como muy bien dijo Machado "desprecia cuanto ignora",empeñarse en hacer entrar el mar en las mentes,el conocimiento en los cerebros,podía molestar a los de siempre,a los de taberna y sacristía, a los de crucifijo,capón y excomunión, a los de misa diaria y rosario asesino,a los señores feudales, terratenientes,esclavistas y negreros...
Antoni Benaigues(Mont-roig del Camp, 1903-Bañuelos de Bureba 1936)había prometido a sus alumnos que los llevaría a ver el mar,ese mar que no llega a la España profunda...no quiso pedir traslado a otro lugar,prefirió quedarse en ese pueblo de cincuenta casas sin agua, sin luz, sin caminos...y con gente que desconfiaba de su método de enseñanza,la técnica pedagógica creada por Freinet.
Les llegó la oportunidad vestida de "glorioso Alzamiento Nacional", y el alcalde del pueblo,el cura y cuatro famílias más, que preferían que sus hijos trabajasen en el campo a que aprendiesen,denunciaron a Benaigues.
Era 18 de julio, las vacaciones habían llegado y Benaigues no tenía que estar en el pueblo.Pero quería que sus alumnos conociesen el mar, que pudiesen saber si se parecía al mar que entre todos habían inventado y plasmado en un cuaderno llamado precisamente "El mar.Visión de unos niños que jamás lo han visto".
Les prometió llevarlos a Mont-roig, a ver el mar.Y quería cumplir su promesa, por eso estaba allí ...
Lo mataron y lo tiraron a una fosa común.Durante mucho tiempo hicieron creer que estaba "en paradero desconocido".
El fotógrafo Sergi Bernal descubrió la figura de Benaigues en el año 2010, durante la exhumación de la fosa común de La Pedraja.El periodista Francesc escribano ha reconstruido su vida en el libro "Antoni Benaigues,el mestre que va prometre el mar".
Fue un maestro más, uno de tantos que pagaron con la vida la osadía de querer luchar contra la incultura...pero además él quiso llevar el mar tierra adentro...
Ha salido la sentencia del caso de Caperucita y el Lobo:
"Visto y considerando los acontecimientos ocurridos y por todos conocidos, fallamos:
1) Que Caperucita no desconocía que podía encontrarse con el Lobo.
2) Que tampoco era ajena al hambre del Lobo, ni a los peligros del bosque.
3) Que si le hubiera ofrecido la cesta de la merienda para que el Lobo calmara su hambre, no habrían ocurrido los sucesos referidos.
4) Que el Lobo no ataca a Caperucita de inmediato y hay evidencias claras que primero conversa con ella.
5) Que es Caperucita quien voluntariamente le da pistas al Lobo y le señala el camino de la casa de la abuelita, lo cual claramente la convierte en cómplice.
6) Que la anciana no es imputable ya que confunde a su nieta con el Lobo.
7) Que cuando Caperucita llega y el Lobo está en la cama con la ropa de la abuela, Caperucita no se alarma.
8) Que el hecho de que Caperucita confunda al Lobo con la abuelita demuestra lo poco que iba a visitarla, hecho que se tipificaría como abandono de persona anciana por parte de la joven Caperucita.
9) Que el Lobo, con respuestas simples y directas, quiere desesperadamente alertar a Caperucita sobre su posible conducta final.
10) Que cuando el Lobo, que ya no sabe qué más puede hacer para alertarla y se come a Caperucita, es porque ya no le quedaba otra solución.
11) Que es altamente posible que antes Caperucita hiciera el amor con el Lobo e incluso lo disfrutara.
12) Que cobra cada vez más fuerza la versión de que Caperucita, cuando oye la pregunta del Lobo: «¿Adónde vas?» Realmente respondió: «A bañarme desnuda en el río...».
13) Que se desprende del punto anterior que es Caperucita la que provoca los más bajos instintos brutales y depredadores, en la pobre fiera.
14) Que el Lobo ataca, si, pero tal hecho corresponde a su propia naturaleza y a su instinto natural y animal, exacerbados por la conducta de la susodicha Caperucita.
15) Que merece un párrafo aparte la madre de Caperucita, en quien se aprecia signo de culpabilidad por no acompañar a su hija, conociendo los peligrosos del bosque.
Por todo lo antes dicho, se absuelve al Señor Lobo y se dispone además:
1.- Apercibir a la familia de Caperucita, imponiendo a la abuela que se presente en el hospital que se designe, para su observación gerontológica.
2.- A la madre, apercibirla para que cumpla correctamente con sus deberes de madre..
3.- A Caperucita, 1º Trabajo comunitario en el zoológico local para conocer plenamente la naturaleza y el instinto animal. 2º Indemnizará al Sr.Lobo a razón de 100 € diarios y ha de prepararle todas las tardes la merienda durante un año.3º A pagar las costas del proceso.
Aclarar asimismo en el presente fallo que este proceso no afecta el buen nombre y honor del señor Lobo.